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Cómo cuidar tu piel en verano
Los rayos del sol están en su punto álgido entre mayo y mediados de septiembre. Por ello, es importante protegerte del sol durante las actividades al aire libre.
Además de la crema solar, los complementos alimenticios también son eficaces para preparar la piel para la exposición al sol.
Descubre cómo preparar tu piel para el bronceado:
Daño solar en la piel
Es importante saber que no sólo el sol emite rayos ultravioletas (UV) que son perjudiciales para la piel. De hecho, estos rayos casi invisibles también son emitidos por las lámparas de bronceado. Aunque la sensación de calor es agradable, hay que tener cuidado de proteger la piel.
Una exposición prolongada provoca quemaduras solares, alergias y un envejecimiento prematuro de la piel. Además, existe un riesgo de cáncer: melanoma o carcinoma. El exceso de sol también puede provocar la degeneración de la retina e incluso dañar los ojos. Y como no todos somos iguales ante el sol, las personas de piel clara deben extremar la vigilancia.
Complementos alimenticios para preparar la piel para el bronceado
Los complementos alimenticios refuerzan la protección que proporciona una buena crema solar, si se toman con prudencia, ayudan a preparar la piel para los rayos del sol y para responder eficazmente.
Ventajas de los complementos alimenticios para la piel
Estos productos naturales se componen de betacaroteno, uvas y tomates, etc. En otras palabras, tomar suplementos solares prepara la piel para el bronceado y le da un aspecto bronceado natural.
Sin embargo, es aconsejable iniciar el tratamiento antes del periodo de exposición al sol. Debes seguir tomándolos durante el periodo estival para mantener el bronceado y la luminosidad de tu cutis.
Como puedes ver, los complementos alimenticios para el sol contienen ingredientes activos que cuidan la piel. Estos productos naturales potencian el fenómeno del bronceado que, recordemos, es la barrera natural que hace la piel contra los rayos UV.
Sin embargo, el índice de protección del bronceado se sitúa entre 3 y 5, siendo necesario más para prevenir el riesgo de cáncer.
Los complementos alimenticios contribuyen a la reconstrucción del tejido cutáneo. Estos últimos están efectivamente sometidos al estrés oxidativo y envejecen prematuramente. Los ingredientes activos de los nutrientes hacen que la piel sea más bonita y tomar complementos alimenticios ayuda a mantener una buena salud.
¿Qué principios activos evitan las quemaduras solares?
La exposición al sol debe prepararse con varios días o incluso meses de antelación. Y por una buena razón, la piel debe estar preparada para recibir demasiado sol.
Los ingredientes activos de los complementos alimenticios mejoran la hidratación de la piel y previenen los daños causados por los rayos UV. Entre los ingredientes activos eficaces, encontrarás carotenoides que protegen la piel de los efectos nocivos de los rayos UV. Además, aportan flexibilidad e hidratación a la piel.
Los antioxidantes como la vitamina E y el selenio también preparan la piel para el bronceado. También son conocidos por sus efectos neutralizadores de los radicales libres. En el mismo registro, se encuentran los ácidos grasos esenciales, omega-3 y omega-6. Los complementos alimenticios a base de onagra, aceite de borraja y semillas de uva también protegen la piel contra los efectos de los rayos UV.
Algunas personas también defienden los beneficios de las plantas fotosensibilizadoras, como el apio. El único problema es que hay que beber más de un litro de sopa para beneficiarse de una protección eficaz contra los rayos del sol.
En cualquier caso, te recordamos que los complementos alimenticios deben combinarse con una loción o crema solar. Aplícalo en las zonas más expuestas, como las orejas, el cuello, los brazos y los pies.
¿A qué horas debes evitar salir al sol?
Aunque la crema solar y los complementos alimenticios protegen la piel de los rayos UV, las sesiones de bronceado deben limitarse entre el mediodía y las 16:00 horas. ¿Por qué deberías hacerlo? Sencillamente porque los rayos del sol son especialmente fuertes durante esta época. Además, evita ir con el torso desnudo y sin sombrero o sombrilla.
Debes saber que incluso una crema solar con factor 50% no te protegerá completamente de los rayos del sol. Ni siquiera el bronceado filtra los rayos UV. En cualquier caso, lleva ropa ligera y cubriente, un sombrero o resguárdate regularmente cuando el sol esta más fuerte.
¿Qué hacer si tu piel es alérgica al sol?
Los días de verano son para descansar y tomar el sol. En otras palabras, quieres disfrutar de los días soleados. Pero ¿estás suficientemente informado de los efectos nocivos de la sobreexposición a los rayos solares? Algunas personas pueden incluso desarrollar enrojecimiento o picor en los brazos y el escote. Estos signos son la prueba de que el cuerpo es alérgico al sol.
La alergia al sol o las quemaduras solares del verano pueden durar varios días, lo que puede arruinar tus vacaciones. Esta enfermedad afecta con mayor frecuencia a personas de piel clara de entre 25 y 35 años. Afortunadamente, es posible remediar la afección o, al menos, aliviar sus efectos. Para ello, aplica regularmente una protección solar de 50. Evita también la exposición prolongada al sol, es mejor exponerte al sol gradualmente, durante 10 minutos cada vez.
Los alimentos y complementos alimenticios ricos en antioxidantes también pueden ayudar a combatir las quemaduras solares del verano. Elige alimentos como zanahorias, tomates y albaricoques. El objetivo es preparar mejor la piel para el sol.
En caso de ácaros de verano, lo primero que hay que hacer es aclarar la piel con un gel de ducha neutro. A continuación, rocía tu piel con agua micelar. También debes utilizar una crema que contenga antihistamínicos y cortisona. Como alternativa, aplica un tratamiento para después del sol para calmar e hidratar la piel. Ten en cuenta que una alergia al sol no tratada puede llegar a ser dolorosa e incluso incapacitante.
En caso de duda, pide cita con un dermatólogo. Antes de que esto ocurra, toma todas las precauciones necesarias para preparar tu piel para el sol. Esto incluye el uso de complementos alimenticios.